jueves, 7 de mayo de 2009

¿ANTE LA CRISIS QUE?

Hola amados amigos y hermanos, deseo compartir con ustedes un par de meditaciones que escribi en semanas pasadas para la congregación que pastoreo, como es asunto conocido de practicamente todos, México ha pasado por un estado de emergencia sanitaria, estado que aun continua... sin embargo, confiamos en un Dios poderoso, asi que cobramos ánimo y fortaleza.

Se que estas palabras serán de bendicion a sus vidas, reciban Bendiciones

Rev. Mauricio López F.
Apostol y Pastor de La Iglesia del Señor A.R.


CERO TEMORES

(Sal 91:5-7)
¿De dónde vienen los miedos o pavores colectivos? Lo único que se mira en la T.V, en estos días son malas noticias y parecen no parar. La información ciertamente es necesaria, pero cuando en el corazón se carece de fe y seguridad en Dios, entonces lo que se empieza a generar es miedo, inseguridad ante lo futuro, es como si todo el horizonte se llenara de borrascas tormentosas. Epidemias, temblores, crisis económica, violencia, narcotráfico… etc. Hace unas horas alguien me preguntaba… ¿usted cree que esto sea el fin del mundo? Esa pregunta me la hizo alguien que conocí por primera vez y no fue difícil detectar su temor y su necesidad, lo que me abrió la oportunidad de compartirle la esperanza y seguridad que solo proviene de Cristo. Solo Dios puede dar seguridad a los corazones en medio de las dificultades, el Señor Dijo: “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
Cuando Cristo está con nosotros los temores se van, y damos lugar en el corazón a una certidumbre de fe. No tenemos miedo aun de las pestes o la mortandad que destruye en la tierra, esto no es una declaración temeraria, ¡es fe!... Levántate Iglesia del Señor y muestra en este mundo que tu sabes caminar tomado de la mano de un Dios poderoso en el cual has depositado toda tu confianza.

SALVANOS… PROSPERANOS
(Sal 118:25)
Vemos aquí dos palabras que cuando se asocian dan como resultado algo muy interesante… perspectiva. Déjenme explicar lo que trato de decir al hablar de perspectiva, si definimos esta palabra entendemos que se refiere a proyección, a planes, es decir un futuro que se vuelve promisorio. Ahora bien, en un momento de desesperación el clamor a Dios es por salvación, ser librado del peligro o de la muerte, como ahora vemos a muchos que claman ante el temor de la enfermedad; sin embargo, una vez a salvo ¿Qué más hay? ¿Volver a lo mismo? ¿Regresar a la rutina? Eso es precisamente lo que muchos parecen estar esperando, con todo, el clamor no debería detenerse ahí, tras el clamor debe levantarse la petición de ser prosperados o bendecidos.
El mensaje bíblico si bien contiene elementos apocalípticos (fin del mundo o de los tiempos), jamás es un mensaje que roba la esperanza o que debiera producir temor, por el contrario siempre es un mensaje de esperanza, de una perspectiva de cosas mejores, aunque en muchas ocasiones se tenga que cruzar antes por desiertos o momentos de dificultad, este es un momento especial para México y el mundo es momento para que la iglesia se levante a proclamar un mensaje de esperanza…

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